La octava fue la vencida

El clubhouse de primera base del Casas Geo vibro con la sencilla celebración y mezcla de emociones de los Tigres de Aragua tras su primer título en la Serie del Caribe y séptimo para Venezuela.

¡Aquí no se gana con nombres, se gana con hombres!

Así gritaba Alexander Delgado a todo pulmón en el clubhouse de los Tigres de Aragua, bajo una lluvia de cerveza y cámaras de televisión minutos después de consolidar el séptimo titulo para Venezuela en la Serie del Caribe.

"Esto es realmente increíble, he cumplido otra de mis metas y lo mas especial es que fue con este equipo que nunca se rinde. Somos un grupo con mística y finalmente le estamos dando a esta fanaticada de los Tigres algo que se merecían desde hace mucho tiempo por su apoyo durante todos estos años de victorias" declaraba Delgado, a quienes sus compañeros le dicen: La leyenda.

En efecto se lo merecían. Los Tigres llegaron a Mexicali con el peor equipo, en el papel, que han armado para una Serie del Caribe en su jubilosa etapa de triunfos.

Este no fue el equipo de Miguel Cabrera. No habían refuerzos como Ramón Hernández, Alex Cabrera o Magglio Ordóñez. Acá ni siquiera se asomo el nombre de Róbert Pérez. No habían nombres de jugadores de Grandes Ligas, ni refuerzos importados de categoría.

Era un equipo de sobrevivientes.

Fue un grupo de jugadores con muchas ganas de demostrar que cada uno de ellos tiene la capacidad de jugar béisbol al mejor nivel, y que los esquemas del juego se pueden romper con el único fin de obtener victorias.

Es más, este equipo demostró que no tiene que existir una buena relación entre un mánager y sus jugadores para ganar.

La celebración de los Tigres en el pequeño clubhouse visitante del Estadio Casas Geo, tenia impregnada la incertidumbre del ¿Qué vendrá después? ¿Hacia donde vamos después de esto?

"Esta temporada nosotros teníamos que demostrarle a mucha gente que para ganar se necesitan hacer las cosas pequeñas. Superamos muchas adversidades y después de mucho tiempo logramos nuestra meta, ganar la Serie del Caribe" nos decía Rafael Rodríguez Rendón emocionado y bañado en cerveza con sabor a gloria.

Obviamente se hizo la pregunta obligada: ¿Regresará Buddy Bailey?

"Las puertas están abiertas para el, es el mánager que ha llevado a nuestra organización a otro nivel y la directiva del equipo lo apoya en sus decisiones" dijo el presidente de los campeones caribeños.

Después de 7 decepciones en el clásico invernal, los representantes de la ciudad jardín de Venezuela alzaron su primer trofeo internacional. La octava fue la vencida, o mas bien la mayor rugida.

Aragua se convirtió en el primer equipo venezolano en coronarse en suelo mexicano desde que las Águilas del Zulia hicieron lo propio en Mazatlán, Sinaloa en 1989.

El estadio Casas Geo de Mexicali lucio impecable en una de las mejores ediciones del evento en su historia.

Mexicali: La ciudad que atrapó al sol

La temporada 2008-2009 de las Ligas Invernales de Venezuela, México, Puerto Rico y República Dominicana no pudo tener un mejor destino final que Mexicali, Baja California.

En serio. Dudo mucho que otra ciudad haya podido montar la Serie del Caribe con el afán, la organización y el ambiente que le puso a este clásico esta pequeña ciudad fronteriza.

Llegar a esta ciudad es bien extraño. Una gran parte de sus visitantes llega por vía terrestre y tiene que pasar por el punto fronterizo que la une con su similar del norte Calexico, California.

Quien no ha venido por estos lados tiene la idea de que esto es como una tierra sin ley donde los mexicanos buscan un huequito para pasarse a los Estados Unidos y los guardias gringos están del otro lado listos para agarrarlos y deportarlos. Nada más alejado de la realidad.

Yo venía por tierra desde San Diego y me intrigaba conocer el punto fronterizo. Calexico, es como ver un pueblo Americano con influencia hispana, pero que aún sigue siendo Americano cien por ciento en sus tradicionales negocios, limpieza, leyes, etc.

Al ver que la frontera se acercaba saque mi pasaporte para mostrarlo y mi sorpresa llegó cuando de pronto pasamos por debajo de una especie de galpón, y se nota que de una cuadra a otra los letreros y referencias cambian a español.

Sin darme cuenta ya estaba en Mexicali, con pasaporte en la mano y sin revisión alguna.

Andrés, uno de los guías voluntarios del evento, me explicó el proceso: " Lo que pasa es que las dos ciudades es como si fuera una y ya no existe un punto de control cuando pasas a México, a menos que vayas más allá de Mexicali. Acá te revisan tu pasaporte sólo cuando entras a Estados Unidos".

Mi asombro fue total durante la semana. Mexicali es la ciudad más al norte de Latinoamérica y su influencia Americana es evidente, pero es mayor la influencia Mexicana en Calexico.

Esta sabrosa mezcla de culturas que evidencia que las barreras y bordes existen solo en la concepción de los gobiernos, fue el hogar de los campeones del béisbol latino por una semana. Fue una fiesta de béisbol con todo el sabor del Pacífico y el toque organizacional de los americanos, que ya se ha vuelto una costumbre para los mexicanos en estos eventos.

El presidente municipal Rodolfo Valdez fue uno de los que se monto en convencer a los equipos de asignar a Mexicali como sede del evento y ante muchas barreras, finalmente aceptaron.

Y bien que quedaron complacidos.

Evidencia de esto fue el estadio Casas Geo. Construido en 1976 y remodelado casi en su totalidad para lucir una mezcla entre un pequeño parque moderno de Grandes Ligas, pero con todas las características del béisbol invernal del Pacifico.

"Se invirtieron 250,000 en nuestro estadio, sin contar lo que costo la nueva pantalla electrónica. Se instalaron nuevas torres de luces, se terminaron las gradas de concreto, se hicieron palcos de lujo, áreas VIP, restaurants y tascas internas y un excelente área de trabajo para los medios" dijo Valdez complacido por el trabajo en equipo que se realizo en su ciudad.

Hoy el nido de los Águilas, es sin duda alguna uno de los mejores parque de pelota de todo el circuito invernal.

Hospitalidad Cachanilla

A los locales se les conoce como "Cachanillas" por una planta que se da por estos lados. O mejor…"Cashanillas" como ellos mismos pronuncian las vocales con las letras C y H.

Quien ha asistido a una Serie del Caribe sabe que este es un evento que traspasa lo deportivo. Es un encuentro social de la cultura beisbolera que une a los cuatro países participantes.

Mexicali se porto a la altura y mas allá de lo que han brindado exitosamente sedes como Santo Domingo, Mazatlán, Hermosillo, Puerto La Cruz o San Juan. La ciudad y su gente se paralizaron por una semana para brindarle a sus visitantes lo mejor de ellos.

"De donde eres?" me dice el encargado de un restaurant.

"Venezolano" respondo con orgullo.

"Pues el primer tequila corre por mi cuenta, y dígame lo que quiere pa´que se sienta bien atendido!".

Ese es el espíritu de hermandad que nos une.

En el Casas Geo, los jugadores tenían que pasar por el medio de los fanáticos para llegar al autobús. Tuve la suerte de acompañar al equipo venezolano en su salida después del título, y mi sorpresa fue cuando vimos a un camino hecho por fanáticos mexicanos para acortejar al equipo.

Mientras pasábamos por el medio de ellos los aplausos y felicitaciones no cesaban para el plantel que acababa de derrotar al propio equipo mexicano.

Nunca se sintió la decepción por parte de ellos. Los fanáticos estaban felices por el triunfo del que jugó mejor, y por el evento que entre todos estaban montando. Los cachanillas demostraron su altísimo espíritu deportivo.

Finalmente comprobé por que acá no son "las Águilas", sino "los Águilas". Esta realmente una tierra de caballeros.

Muchas gracias Mexicali. Esperemos que tu sucesor esté a la altura.

Tu banda y cumbia norteña sonaran para siempre en nuestros corazones.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
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